Cuando Mia, la gata, se dio cuenta de que había llegado un nuevo miembro a la familia, decidió que era su deber protegerlo.
Desde el momento en que el bebé Sonny llegó a la casa, casi no se ha separado de su lado, su amor es incondicional.
Ella lo protege cuando está enfermo y a menudo lo acompaña cuando mamá y el bebé salen a dar un paseo.
Mia también adora pasar tiempo con los demás miembros de cuatro patas de esta feliz familia, les encanta explorar y tener muchas aventuras juntos.
Y como podrás ver, también están dedicados a Sonny…
Qué familia tan encantadora que rebosa amor por todos lados.
¡Mira el video!